Todos tenemos un ídolo en nuestras vidas, por el cual siempre esperamos conseguir una foto, una camiseta o un disco firmado, pero ¿en algún momento nuestro nivel de fanatismo llega a su punto de satisfacción o no tenemos un límite?
La ambición y el consumismo nos provocan esa sensación de querer aún más lo que es inalcanzable.
En ella, el usuario logra tener una experiencia más interactiva con el talento mediante una videollamada.
Nació como la app que les permite a los usuarios conectar con celebridades y pagar por mensajes con videos pregrabados, pero ahora esta función ha evolucionado y pueden tener una conversación en tiempo real.
Cameo tiene una lista de celebridades disponibles para conversar por una cierta cantidad de su tiempo a cambio de un coste.
Estas llamadas pueden durar hasta quince minutos y el precio promedio es de treinta dólares. Algunos ofrecen dos o tres minutos por llamada, y los precios varían dramáticamente, como una de las tarifas más altas que un fan pagó: U$225 por una llamada de diez minutos con la actriz Vanessa Marcil.
Es así cuando Cameo intenta incluir esta función dentro de su app para evitar tercerizar el servicio; para ello, prueba este producto con más de tres mil llamadas con una tipología como encuentros y saludos temáticos organizados por talentos, charlas de café, conciertos privados y lecturas de cartas del tarot.
Con la suma de todo esto, finalmente encontraron la estrategia para lograr la popularidad que está consiguiendo hoy en día esta aplicación.
Cameo Calls es sin duda una forma divertida, personalizada y próxima de tener una conversación con alguien del quien eres fan.
En ella, se crea un nuevo espacio de encuentro con los seguidores de forma más segura pero siempre creando empatía y proximidad para lograr el vínculo que merecen las dos partes.
En otros tiempos, ir a un encuentro con tu celebrity favorito requería esperar en una larga fila para tener solo 5 o 10 segundos de tiempo con el talento. Ahora, tienes una experiencia más personal que si fuera el fan número cien en una larga fila de personas.
Ahora, tras una investigación, los creadores afirman que los encuentros con celebridades en eventos en la vida diaria podrían no ser los más seguros: