Dequebuzz - Exportando influencia
  • Home
  • Quiénes somos
  • Casos de estudio
    • Casos mundiales >
      • LVBET - english
      • LVBET
      • Mahou - The best seat
      • Bimbo - Global Energy Race
      • Selección Nacional de México - América para los mexicanos
    • Casos continentales >
      • Ukuthula- #AnotherTomorrow
      • Samsung - Galaxy Note 8
      • Huawei - See More
      • Pepe Jeans - One jacket
      • CocaCola FM - Ronaldinho
    • Casos nacionales >
      • Movistar+ #JugamosTodosM+ English
      • Movistar+ #JugamosTodosM+
      • Metrovacesa - #LaCasaQueSueñas
      • Gana Energía - #SomosLaResistencia
      • Huawei
      • Honor 8X
      • ILoveBrico - Purifica tu 2021
      • Me&MyLife - Pulseras con sentimiento
      • Xview - Megacable
      • Amazon Prime Video-Microinfluencers
      • Eurocaviar- #Hazlocotidiano
      • Brugal- Festivaleando
      • Komvida - Oscoby
    • Casos Nonprofit >
      • Aldeas Infantiles México - 45 Aniversario
  • Buzzstation
  • Blog
  • Contacto
  • Es | En

DEQUÉBLOG

Alexandre Yersin, el azote de las influencias

4/28/2020

0 Comentarios

 
Por Nacho Samper, Strategy Director en DQB. 

¿Puede un influencer no anhelar la influencia sino, paradójicamente, querer destruirla? Si tomamos esta afirmación como el juego léxico que es, desde luego que puede. Vale, no hablamos de la misma influenza, pero, ¿puede estar más de moda este término, por desgracia?

Nuestro influencer noble de este mes tampoco fue lo que estamos acostumbrados a denominar como tal, más que nada porque nació a mediados del siglo XIX y lo más cerca que estuvo de un artefacto tecnológico debió de ser un telégrafo. Pero por otras muchas razones, y más importantes, sí podemos catalogarlo como una figura positivamente influyente. Hablamos de don Alexandre Yersin.
Imagen
Antes de entrar en materia, miremos su foto. Yersin era un guaperas. Si viviera en estos días, sería un hipster sin necesidad de adaptar lo más mínimo su look ni su outfit, con perdón de los anglicismos. Aunque no lo veríamos tomándose un Martin ‘n’ Lewis de 5 pavos como Mia Wallace, sino enredando con probetas y tubos de ensayo para salvarnos la vida. Sutiles diferencias.
Y es que al señor Yersin le debemos nada menos que el descubrimiento de los bacilos de la peste bubónica, que recibieron en su honor el nombre científico de Yersinia Pestis. Por si no han oído hablar de esta enfermedad, también llamada muerte negra, sólo comentar que, a lo largo de 400 años de brotes intermitentes, se llevó por delante a más de 100 millones de personas y dejó Europa como una fosa común a cielo abierto. Gracias al descubrimiento de los bacilos, que permitió conocer el origen de la afección y comprender cómo se transmitía, se pudieron aplicar tratamientos con suero y antibióticos que salvaron otros cuantos millones de vidas. Hoy en día sería una especie de anticristo para los antivacunas, seguro.
Imagen
Yersin estuvo un tiempo rodeado de otros grandes bacteriólogos, la crema de la época, como Robert Koch y Luis Pasteur, en cuyo instituto estuvo investigando varios años y a quien acabó considerando un rival. Allí coqueteó con otras tantas enfermedades y patógenos que descubrió y desentrañó, como el carbunco o la difteria. Pero no tardó mucho en convertirse en un alma nómada, casi errante: alternó estancias en su Europa natal con largos viajes a Indochina y, sobre todo, prolongadas temporadas en Vietnam, donde terminó muriendo y es considerado toda una celebridad. Podría decirse que también fue un influencer de viajes, sólo que en vez de ir en primera clase con una copa de champán en la mano se tiraba semanas en barcos de mala muerte o aviones de hélice que temblaban como una montaña rusa. Y con dos Guerras Mundiales de por medio, nada menos, aunque por suerte la segunda apenas la vio empezar, ya retirado y alejado de las bombas en su mansión tropical de Nha Trang. 
Imagen
Además de médico y científico, fue tremendo aventurero y explorador. Menudas instantáneas nos habría legado de haber tenido un smartphone con un buen 4G: playas paradisíacas, selvas impenetrables, puertos febriles o portentosos bodegones de quincalla de laboratorio. No se arredró ni cuando hubo que adentrarse en la jungla machete en mano o pelearse con bandidos, que en una ocasión casi se lo llevan por delante y lo dejaron 2 semanas postrado en una camilla, sin que esto interrumpiera la expedición bosque a través. Al final consiguió otro de sus objetivos: fundar la ciudad refugio de Dalat, un oasis de su colonia a salvo de las peores enfermedades.
Pudo haber sido incluso más famoso por otros descubrimientos. Hizo una notable fortuna cultivando árboles de caucho que luego le vendía a Michelin y quinina que exportaba al mundo entero para que luchara contra la malaria (con pinzas, pero puede considerarse uno de los precursores del gin tonic. Más moderno imposible). Llegó a importar plantas de coca a sus vastos campos de cultivo vietnamitas, a partir de las cuales creo una bebida llamada Cola-Canela (que abreviaba como Co-Ca) y que, de haber empezado a importar y comercializar, hoy los copazos seguro llevarían su nombre. A punto estuvo de ser un capo de la coctelería, como ven.
Imagen
Como los top influencers de este siglo, a Yersin le encantaba ser el primero en probar y poseer las novedades tecnológicas de su época. Fue dueño de una de las primeras bicicletas Citröen, de los primeros proyectores de cine, de las primeras motocicletas y automóviles que llegaron a Indochina. Llegó a pilotar uno de los primeros aviones que existieron, incluso. Su curiosidad desbocada y la amplitud de sus arcas le permitían toda clase de lujos, siempre con el ánimo del pionerismo y la investigación. Su casa es hoy un museo en su honor, y su nombre figura en varias calles de todo Vietnam. Supera eso, Rubius.
No puedo dejar de recomendar la novela Peste & Cólera, de Patrick Deville, que narra la vida de Yersin con una maestría que ya quisiera yo. Magnífica y entretenidísima obra sobre este influencer decimonónico que en estos días de pandemia, no me cabe duda, estaría dejándose la vida en la vanguardia y no subiendo stories desde su casa.

Respect, monsieur Yersin.
0 Comentarios

    Autor

    DeQuéBuzz es una agencia digital especializada en marketing de influencers sin fronteras.

    Archivos

    Junio 2024
    Marzo 2024
    Noviembre 2021
    Octubre 2021
    Julio 2021
    Junio 2021
    Mayo 2021
    Abril 2021
    Marzo 2021
    Noviembre 2020
    Julio 2020
    Abril 2020
    Febrero 2020
    Enero 2020
    Diciembre 2019
    Noviembre 2019
    Julio 2019
    Junio 2019
    Mayo 2019
    Abril 2019
    Agosto 2018
    Julio 2018
    Diciembre 2017
    Abril 2017
    Marzo 2017
    Febrero 2017
    Enero 2017
    Diciembre 2016
    Noviembre 2016
    Agosto 2016
    Julio 2016
    Junio 2016
    Mayo 2016
    Abril 2016
    Marzo 2016
    Febrero 2016

    Categorías

    Todo
    Comunicacion
    Guia
    Listas
    Pasos

    Canal RSS

Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
HOME        QUIÉNES SOMOS        CASOS DE ESTUDIO        BUZZSTATION        BLOG        PAQUETES        CONTACTO

AVISO DE PRIVACIDAD        EN/ESP

  • Home
  • Quiénes somos
  • Casos de estudio
    • Casos mundiales >
      • LVBET - english
      • LVBET
      • Mahou - The best seat
      • Bimbo - Global Energy Race
      • Selección Nacional de México - América para los mexicanos
    • Casos continentales >
      • Ukuthula- #AnotherTomorrow
      • Samsung - Galaxy Note 8
      • Huawei - See More
      • Pepe Jeans - One jacket
      • CocaCola FM - Ronaldinho
    • Casos nacionales >
      • Movistar+ #JugamosTodosM+ English
      • Movistar+ #JugamosTodosM+
      • Metrovacesa - #LaCasaQueSueñas
      • Gana Energía - #SomosLaResistencia
      • Huawei
      • Honor 8X
      • ILoveBrico - Purifica tu 2021
      • Me&MyLife - Pulseras con sentimiento
      • Xview - Megacable
      • Amazon Prime Video-Microinfluencers
      • Eurocaviar- #Hazlocotidiano
      • Brugal- Festivaleando
      • Komvida - Oscoby
    • Casos Nonprofit >
      • Aldeas Infantiles México - 45 Aniversario
  • Buzzstation
  • Blog
  • Contacto
  • Es | En